Así hemos decidido titular el resumen de la quinta jornada, tal vez pueda parecer que somos demasiado «gallitos», pero sinceramente es con la sensación que hemos vuelto de Cobisa tras el 3-3 final que nos deja lideres junto a Rivas Futsal con 13 puntos en el casillero.
Decimos lo de dejarnos dos puntos, por que los tres tantos que encajamos en la tarde de ayer fueron en segunda jugadas, en balones rechazados y errores defensivos que nos siguen costando goles en contra, tal vez nuestro punto más débil en lo que llevamos de temporada.
Es cierto que en juego y en ocasiones vamos siempre un paso por delante de cada rival y que al cabo de los cuarenta minutos son innumerables las oportunidades de gol que apuntamos, pero en la pista de Cobisa no tuvimos acierto, balones que se marchaban rozando la gloria, errores en el último toque y un soberbio Álvaro Recio bajo palos, que evito mucho daño a su equipo.
Otro «ex» también nos hizo recordar el gran jugador que es, siendo (en la opinión personal del que escribe) el mejor de su equipo y abriendo el marcador a rechace de Alex Pérez, poniendo el 1-0 y la alegría en la grada.
A partir del 1-0 empezamos a ser más nosotros mismos y el acercamiento a la portería de Recio se iba intensificando hasta que llego Palomares para marcar el empate en un tanto cien por cien de «killer» de área. Con 11 minutos por delante para el descanso y donde no supimos cerrar el partido, desperdiciando (como veníamos diciendo) demasiadas oportunidades, llegando a los diez minutos de descanso con el 1-1 en el marcador.
En la reanudación rápidamente nos pusimos por delante con gol de Pitu, el cual a parte de poner el 1-2 realizo un gran encuentro, aprovechando bien los minutos que tuvo en pista. Tal vez nos la veíamos felices, al ver como acabamos la primera parte y como empezaba la segunda, creyendo que poco a poco íbamos a controlar el partido, pero aquí nadie regala nada y en frente teníamos un buen equipo, con gente consagrada en este deporte y que no iba a dejar escapar los errores que cometiéramos y así fue como en un minuto Toni Sierra le dio la vuelta al marcador.
Con el 3-2 en contra, tocaba nuevamente remontar y para eso tenemos a Alex Jiménez que después de ver como desperdiciábamos varias ocasiones, marco el gol de la tarde, de fuerte zapatazo a la escuadra donde su buen amigo Recio, no pudo llegar, 3-3 más que merecido.
A partir del empate, el partido fue derivando de un soberbio partido de dos formas de ver y jugar a fútbol sala, a la forma de mal entender nuestro deporte. Tras una dura entrada sobre Pitu, repetimos dura entrada, no falta, dura entrada que hizo volar al bueno de Sergio delante del banquillo visitante, el ambiente se caldeo demasiado. Era obvia la reacción de nuestro banquillo ante la entrada a Sergio y también era obvia las escusas del banquillo visitante, pero la suma de reacciones hizo a la grada subir la temperatura y después de llevar mas de una hora animando a su equipo de forma saludable y entretenida para el espectador, empezaron a ver gigantes donde sólo había molinos.
En lo deportivo tuvimos oportunidades para cerrar el encuentro, incluso fallamos un doble penalti en los pies de Palomares o mejor dicho se lo paro Recio y en la recta final fuimos a por los tres puntos, aguantando un débil juego de cinco y en la última ocasión a sólo dos segundos del final, vivimos el último acto extra deportivo de la tarde. Contra rápida de nuestro equipo y desde el banquillo rival lanzan una botella de agua a la pista para que el juego se pare de cualquier forma. Lanzamiento bien identificado por los colegiados, que en un encuentro donde estuvieron algo superados por el ambiente, no dudaron en expulsar al míster local con roja directa, como incitador de la acción ya que fue el que dejo caer la mencionada botella dentro de la pista y posteriormente enviada al centro de la misma por el portero suplente (tarjeta amarilla para el mismo).
Polémica en la pista, todos reclamando más de lo que realmente los árbitros podían hacer y bote neutral que decidimos jugar en busca del gol sobre la bocina que no llego. Final del encuentro, un punto que nos traemos a casa en una pista que no va a dejar escapar muchos puntos, por lo que hay que hacerlo bueno, en una temporada donde hay que ir poco a poco recogiendo los frutos del trabajo.
Ahora volvemos a Villafontana, que no tiene nada que envidiar al ambiente que vivimos ayer, que creíamos que era más impactante y que sólo al final del encuentro tuvimos que conocer su lado más duro y vulgar. El martes partido de Copa del Rey, donde recibimos a un viejo y querido «enemigo» el CD Leganés FS de segunda división y en el horizonte el partido del próximo sábado ante un clásico de la Nacional V, nos visita el FS Talavera con nuestro querido Chispi en frente.